Tras el partido del jueves pasado, los Zorros llegaron al último partido de 2022 con unas sensaciones renovadas y con hambre de gol y de jugar.
Pudimos observar un calentamiento bastante conservador pero acertado, sin necesidad de forzar la máquina antes de comenzar el partido. Una vez acabada la charla del capitán de los zorros, el conjunto universitario entró a Razzmatazz Stadium con ganas de arrasar.
Los primeros minutos fueron de tanteo, sin buscar goles desde el primer minuto, buscando los puntos débiles del rival y tratando de aprovechar cada oportunidad. La primeras ocasiones de gol desaprovechadas vinieron de la mano de Fabri y Eric, motivo por el que hizo despertar los fantasmas del pasado y comenzar a generar las dudas que tanto han condicionado el juego zorril en los primeros partidos de la temporada. Pero la tendencia volvería a cambiar tras un potente testarazo de César, nuestro muro en defensa y se empezarían a recortar las distancias al 1-2, y de esta forma cerrando un primer tiempo agitado.
El segundo tiempo empezaría con unos zorros más agresivos, con intención de conseguir el empate en los primeros compases del segundo tiempo. Y tanta insistencia surtió efecto con un gol del capitán del equipo, Eric, con el que la grada empezó a rugir, pero lamentablemente esa fue la última acción del capitán, que tras el gol recibió un fuerte golpe en el estómago y tuvo que salir del campo apoyado en sus compañeros. En los instantes finales de partido, las últimas sacudidas estuvieron a punto de darle la vuelta al marcador con un par de acciones individuales de César y Joan y algunas internadas a la sala main por parte de Victor y David.
Y con esto acabo la primera parte de la temporada de los Zorros FC, un empate que podría dejó un sabor agridulce para nuestros locales en un partido que, a pesar de no mostrar su mejor juego, salieron a darlo todo. Y por último, mención de honor a nuestra jugadora Claudia, que según relata en el postpartido, encontró al amor de su vida durante el partido.